domingo, 17 de noviembre de 2019

EL #MASAJE COMO HERRAMIENTA TERAPEUTICA



Resultado de imagen de MASAJE COMO HERRAMIENTA REHABILITADORAEl masaje produce efectos sobre la piel, los músculos, la circulación y el sistema nervioso. A la hora de realizar un masaje es importante conocer la dirección en el que se da, saber si el calor que se provoca es normal, si la coloración o aspecto de la piel tras la manipulación es normal, conocer el dolor que se produce y el tiempo de duración adecuado.
En SiulMarehabilitación, consideramos el masaje terapéutico como una herramienta fundamental para tratar lesiones como cervicalgias, dorsalgias, lumbalgias o lesiones deportivas, combinándola con otras técnicas como estiramientos, osteopatía, acupuntura, electroterapia, etc.
Existen multitud de masajes, podemos disponerlos en tres clases: RELAJANTES, TERAPÉUTICOS Y DECONSTRACTURANTES:


Los masajes relajantes tienen como principal objetivo eliminar el estrés acumulado a lo largo del día. Deben realizarse con suavidad y el profesional trata de seguir la forma de los músculos a través de ligeros toques con las manos encaminados a activar la circulación y llegar a posibles puntos de tensión. Este tipo de masajes nos ayudará  a relajarnos y a expulsar el estrés de nuestro cuerpo y todo lo que éste representa. Ya sabes que el estrés es una fuente de problemas relacionados con múltiples aspectos de tu organismo.

Los masajes terapéuticos tienen como objetivo aliviar los músculos y corregir malas posturas y posibles daños musculares. Este tipo de masaje debe de ser practicado por un profesional que sabrá determinar cual es la presión y el movimiento exacto que tiene que aplicar para aliviar o corregir un problema relacionado con una lesión. Todos acumulamos pequeñas microlesiones musculares que se producen, bien por la actividad física, bien por una lesión muscular o por una postura errónea en nuestros deberes diarios. El masaje terapéutico trata de corregir, mejorar o curar una lesión muscular provocada por la tensión muscular.
Los masajes decontracturantes tienen como objetivo relajar el músculo cuando éste acumula demasiada tensión. Podríamos decir que se encuentra a medio camino entre el relajante y el terapéutico.Como el anterior es preceptivo que sea administrado por un fisioterapeuta con amplios conocimientos de la musculatura. Ten en cuenta que un masaje de estas características aplicado sin los conocimientos necesarios puede agravar la carga muscular y transformarla en una lesión. Por eso te recomendamos que elijas siempre un profesional titulado que te de todas las garantías para que tu masaje sea una experiencia positiva y sobre todo curativa.

miércoles, 19 de junio de 2019

#VARICES Y #ACTIVIDAD #FÍSICA

Las varices son dilataciones de las venas a causa de una acumulación anormal de sangre debido a la debilidad, a menudo heredada, en las paredes y válvulas de las venas superficiales.
Las venas tienen unas válvulas que impiden el retorno de ese flujo sanguíneo hacia el pie y facilitan la subida. Si la vena está dilatada, las válvulas no cumplen su función y el flujo se invierte, lo cual provoca que aumente la dilatación y se produzcan problemas como edemas, hinchazón de la pierna o, en fases más avanzadas, úlceras o flebitis (trombosis de una variz), entre otras.

La actividad física es un elemento fundamental en la mejora de los síntomas. La finalidad de realizar ejercicio es que los músculos de las piernas, al moverse y contraerse, ayuden al bombeo de la sangre hacia arriba y de esta forma evitar la retención de sangre en los tobillos. Con ello mejoraremos la presión en las venas y la sintomatología, pero nunca curaremos la enfermedad,  Las piernas con más liquido retenido pesan más y duelen más por lo que la reducción del mismo ayudará a mejorar siempre.



Los ejercicios recomendados en estos casos son aeróbicos, frente a los anaeróbicos: colocarse de puntillas, mover los dedos de los pies, realizar flexiones y rotación de los pies, movimientos de pedaleo, etc.
Cuidado al caminar en días muy calurosos ya que podría ser contraproducente. “El calor favorece la dilatación de las venas y esto puede empeorar el problema y agravar los síntomas”
Aquí tienes algunos ejemplos de ejercicios que puedes realizar para mantener a raya tus varices:
  • Separación de piernas

    Separación de piernas

    • Tumbado sobre el suelo, o una alfombra o esterilla.
    • Levantar las piernas estiradas, separarlas y volverlas a juntar.
    • Repetir el ejercicio entre 10 y 15 veces.
  • Movimiento de pedaleo

    Movimiento de pedaleo

    • Tumbado sobre el suelo, o una alfombra o esterilla.
    • Pedalear, como en una bicicleta, enérgicamente.
    • Repetir el ejercicio entre 15 y 20 veces.
  • Giros de las piernas

    Giros de las piernas

    • Tumbado sobre el suelo, o una alfombra o esterilla.
    • Levantar una pierna estirada y hacer giros de la misma, como si se estuviera limpiando un cristal, en el sentido de las agujas del reloj.
    • Repetir el ejercicio con la otra pierna.
    • Volver a la primera pierna y hacer los giros en sentido contrario a las agujas del reloj.
    • Hacer lo mismo con la otra pierna.
    • Realizar entre 15 y 20 giros con cada pierna en cada sentido.
  • Flexiones de los dedos de los pies

    Flexiones de los dedos de los pies

    • Con las piernas estiradas, flexionar y extender los dedos de los pies, alternativamente, con una y otra pierna.
    • Repetir el ejercicio 20 veces.
  • Movimiento de los pies

    Movimiento de los pies

    • Sentado en una silla.
    • Separar y juntar las puntas de los pies.
    • Repetir el ejercicio 20 veces.
  • Flexiones de los pies

    Flexiones de los pies

    • Sentado en una silla.
    • Con los talones apoyados en el suelo, levantar la punta de los pies, luego bajarlas y levantar los talones.
    • Repetir el ejercicio 20 veces.
  • Andar de puntillas

    Andar de puntillas

    • De pie y sin moverse del sitio.
    • Repetir el ejercicio varias veces.

  • Andar sobre los talones

    Andar sobre los talones

    • De pie y sin moverse del sitio.
    • Repetir el ejercicio varias veces.

jueves, 13 de junio de 2019

EL #EJERCICIO Y LA #ARTRITIS



La actividad física es muy beneficiosa para casi todas las personas. 
Durante muchos años se pensó que las personas con artritis no debían hacer ejercicio porque lesionarían sus articulaciones. Sin embargo,  se sabe en la actualidad, que esta creencia no es cierta.



Si tiene artritis o una enfermedad relacionada, el ejercicio es benéfico porque le ayuda a:

• Mantener la flexibilidad de sus articulaciones;
• Fortalecer los músculos que rodean las articulaciones para, de esta manera, incrementar su resistencia;
• Retrasar el deterioro del tejido óseo y cartilaginoso;
• Incrementar la fortaleza de sus huesos; 
• Aumentar la capacidad para ejecutar las actividades diarias;
• Mejorar su estado de ánimo
• Mejorar su estado general de salud y su estado físico, de la siguiente forma:
·         proporcionándole energía para que sea más activo físicamente
·         ayudándole a dormir mejor
·         controlando su peso
·         fortaleciendo su corazón
·         disminuyendo la depresión
·         mejorando su autoestima y sensación de bienestar.

El programa más adecuado para usted dependerá del tipo de artritis que tenga, de las articulaciones que estén afectadas y de la gravedad del deterioro. Sin embargo, también se considerará su estado general de salud y su historial clínico. El grado de actividad de su artritis también determinará qué tipo de ejercicios que podrá ejecutar. 

Riesgos de NO hacer ejercicio
Muchas personas con artritis mantienen dobladas las articulaciones que les duelen, porque al principio así se sienten más cómodos. Si sus articulaciones se quedan en una misma posición durante un período de tiempo prolongado, es probable que pierda la capacidad de enderezarlas. Si no se ejercitan, los músculos se encogerán, debilitarán y fatigarán más fácilmente.
Se recomienda que personas con artritis se mantengan activas todos los días y que hagan ejercicio, por lo menos, por 30 minutos la mayoría de los días de la semana.  
En contraste a los múltiples beneficios del ejercicio, hay consecuencias negativas por no hacer ejercicio cual ninguno.

·         Pérdida de fuerza, resistencia y equilibrio
·         Cansarse rápidamente
·         Disminución de la masa y fuerza musculares
·         Menor flexibilidad articular y amplitud del movimiento

Como tiene artritis, es importante que mantenga sus músculos fuertes, sus articulaciones flexibles y que desarrolle su habilidad de realizar ciertas actividades por tanto tiempo como le sea posible (resistencia). Cuantos más fuertes estén los músculos y los tejidos que rodean las articulaciones, mayor será su capacidad de sujeción y protección, incluso de aquellas articulaciones débiles y dañadas por la artritis.
Las personas con artritis frecuentemente se benefician de un programa equilibrado de ejercicios. Este programa debe incluir variaciones de las siguientes clases de ejercicio, que son:  ejercicios de amplitud de movimiento; ejercicios de fortalecimiento; ejercicios de flexibilidad y equilibrio y ejercicios aeróbicos.

martes, 8 de enero de 2019

#EQUILIBRIO EN EL #ADULTO

El equilibrio es una habilidad imprescindible para la vida diaria, que requiere la compleja integración de información sensorial con respecto a la posición del cuerpo en relación con el entorno y la capacidad de generar respuestas motoras apropiadas para controlar el movimiento del cuerpo.
La evaluación del trastorno del equilibrio en los pacientes geriátricos suele ser una experiencia fustrante debido a la variedad de síntomas que presentan, la falta de hallazgos específicos en el examen físico o en los test diagnósticos y la cantidad de causas probables.

Las caídas representan uno de los problemas más serios asociados a la longevidad. Estas marcan el comienzo de la declinación de la función y la independencia siendo la causa más importante de hospitalización relacionada a lesiones en la población adulta mayor. Uno de cada 3 pacientes mayores de 65 años sufre por lo menos una caída al año y el 10 al 15% de esas caídas se asocian a una lesión grave. La lentitud de los reflejos y la osteoporosis hacen que caídas menores resulten en lesiones graves.
Los factores de riesgo para caídas son debilidad muscular, historia de caídas, alteraciones de la marcha y del equilibrio, deficits visuales, artritis, el uso de ayuda marcha. También tienen mayor riesgo de caídas los pacientes con dificultades para realizar las actividades de la vida diaria, compromiso cognitivo, los mayores de 80 años y los que ingieren 4 o más medicamentos

El ejercicio reduce el riesgo de caídas, así como de depresión y mejora la calidad de vida en los mayores con mareos
Se debe planear una estrategia de tratamiento individualizado, teniendo en cuenta las discapacidades propias de cada paciente, las limitaciones de actividades y la calidad de vida, buscando reducir el riesgo de caídas asociado. Gill-Body (33) sostiene que las estrategias de intervención deben tener en cuenta el compromiso musculo-esquelético, así como los componentes sensoriales y motores que intervienen en el control postural. 

Se ha demostrado que la terapia de rehabilitación vestibular es efectiva para reducir el riesgo de caídas, tanto en los adultos jóvenes, como en los mayores. 
Se recomienda un programa de rehabilitación vestibular, que incluya entrenamiento del equilibrio y de la fuerza muscular sin importar la edad del paciente. Se ha demostrado que la edad avanzada no disminuye los beneficios de la rehabilitación vestibular.
Es fundamental que se los estimule a seguir con actividad física regular, de acuerdo a sus posibilidades, una vez finalizada la terapia.

El buen equilibrio previene las lesiones, mejora el rendimiento deportivo y facilita las actividades de la vida diaria a medida que avanza su día. Los ejercicios de equilibrio son especialmente importantes para las personas mayores, que lamentablemente experimentan una alta tasa de lesiones y muertes debido a la disminución de los sistemas físicos, incluido el sistema de equilibrio.

Autora: Dra. Carolina Melián


viernes, 7 de diciembre de 2018

#PULSACIONES EN #REPOSO




Tus pulsaciones en reposo proporcionan una visión general de tu salud cardiovascular.
La frecuencia cardíaca en reposo es la cantidad de latidos que tu corazón tiene mientras permaneces sin moverte.
El corazón de las mujeres tiende a latir más veces por minuto que el de los hombres. Esto significa que las mujeres tienden a tener pulsaciones en reposo más altas que los hombres.


Se recomienda que se tomen antes de levantarte de la cama.

Unas pulsaciones bajas en reposo, tenderán a reflejar una mejor salud de tu corazón. Hay excepciones ya que unas pulsaciones en reposo bajas que pueden causar mareos o fatiga ocasionales.

Unas pulsaciones altas en reposo, significan que tu corazón está trabajando más duro para hacer circular la sangre y, en general, indica un menor nivel de salud y condición física.  

Los valores de las pulsaciones en reposo de un adulto promedio ronda en los  60 y 100 latidos por minuto.
Muchos factores influyen en la frecuencia cardíaca en reposo: 
Los genes desempeñan un papel importante. Por su parte, el envejecimiento tiende a elevarlo.
El ejercicio regular tiende a hacer que tu corazón lata menos -más abajo explicamos más-.
El estrés, los medicamentos y las condiciones médicas también influyen en la frecuencia cardíaca en reposo.

4 TRUCOS PARA BAJAR TU FRECUENCIA CARDÍACA EN REPOSO
Por ello, a continuación te daremos 4 buenos consejos para bajar tu frecuencia cardíaca en reposo:
Haz más ejercicio.
Cuando das un paseo enérgico, nadas, sales a correr o a rodar en bicicleta, tu corazón late más rápido durante la actividad y durante un corto tiempo después.
Pero el ejercicio diario disminuye gradualmente la frecuencia cardíaca en reposo.
Reduce el estrés.
Realizar técnicas de  relajación, meditación,  y otras técnicas de reducción del estrés reduce la frecuencia cardíaca.
Evita el consumo de tabaco.
Los fumadores tienen mayores frecuencias cardíacas en reposo. Dejar de fumar te ayuda a bajarlas.
Adelgaza
Si es necesario, pierde peso. Cuanto más grande es el cuerpo, más tendrá que trabajar tu corazón para bombear tu sangre (tendrás más pulsaciones por minuto). Perder peso puede ayudar a disminuir la frecuencia cardíaca elevada.


miércoles, 5 de diciembre de 2018

¿QUÉ ES LA #COORDINACIÓN #OCULOMOTORA?




La coordinación óculo-motora, también denominada como coordinación ojo-mano o visomotriz, se puede definir como la habilidad que nos permite realizar actividades en las que utilizamos simultáneamente los ojos y las manos. 

Casi todas las actividades de nuestra vida diaria requieren de la coordinación óculo-motora, por eso es importante estimularla y mejorarla. 
Ejemplos de su uso pueden ser encajar la llave dentro de la cerradura, intentar introducir una tarjeta de crédito en la ranura...




PATOLOGÍAS RELACIONADAS CON UN DÉFICIT EN COORDINACIÓN ÓJO-MANO

Lo primero que hay que tener en cuenta es que la coordinación óculo-motora puede fallar incluso si la visión o los ojos de la persona están intactos, y puede fallar igualmente aunque los músculos o el control de la motricidad funcionan adecuadamente.

El cerebro y sus conexiones neuronales se fortalecen conforme se hace uso de las funciones que dependen de éstos. Por tanto, si entrenamos frecuentemente la coordinación óculo-motora, las conexiones cerebrales de las estructuras implicadas en esta habilidad se fortalecerán. Así, cuando necesitemos coordinar alguna conducta que implique tanto a nuestros ojos como nuestras manos, las conexiones serán más rápidas y eficientes, mejorando la ejecución de dicha conducta

Las consecuencias de padecer una mala coordinación óculo-manual pueden afectar a una gran cantidad de actividades.

viernes, 30 de noviembre de 2018

MALA #CIRCULACIÓN Y #RETENCIÓN DE #LÍQUIDOS



Sensación de piernas cansadas, hormigueos y picores varios, varices, hinchazón y retención de líquidos en pies y piernas, dolor e incomodidad. Estas molestias son debidas a problemas en la circulación sanguínea de retorno, en la que las venas llevan la sangre procedente de los órganos y los tejidos hacia al corazón.
En el caso de que las paredes de las venas no sean lo suficientemente elásticas, la circulación de retorno se hará más lenta y problemática, dando lugar a las molestias que hemos citado.

Las causas son diversas y pueden deberse a factores hereditarios, cambios hormonales, sobrepeso, falta de ejercicio, pasar mucho tiempo en la misma posición, ya sea de pie o sentado, una mala alimentación con exceso de sodio, azúcar y grasas, falta de vitamina E, abusar de tóxicos como el alcohol y el tabaco e incluso llevar ropa demasiado ajustada o zapatos incómodos y con mucho tacón.
Algunos consejos que os ayudarán a reducir las molestias causadas por la mala circulación y especialmente la retención de líquidos.
·         Evitar permanecer sentado o de pie durante muchas horas seguidas. 
Es conveniente cambiar de postura con cierta regularidad, dar un pequeño paseo y mover las piernas. No es nada recomendable cruzar las piernas estando sentado ya que esta postura dificulta la circulación.
·         Beber 2 litros de agua al día.
·         Controlar el consumo de sal porque aumenta la retención de líquidos. Tampoco son recomendables las bebidas con cafeína porque su exceso también provoca ese efecto. Sustituir el café por té verde, que es un potente antioxidante y diurético natural.
·         Evitar el tabaco. El tabaco es tremendamente perjudicial para el organismo, e influye directamente en el deterioro del sistema circulatorio. Si fumas intenta reducir al mínimo el número de cigarrillos consumidos a lo largo del día, retrasa todo lo que puedas la hora del primer cigarro del día y deja de asociarlo a las sobremesas y a tomarlo con otras sustancias potencialmente adictivas como el café y el alcohol..
·         Moverse. Por muy cansados que nos sintamos hay que hacer un esfuerzo y practicar algún tipo de ejercicio de intensidad moderada que nos obligue a mover las piernas: bicicleta, elíptica, caminar a buen ritmo… Al poco tiempo notaremos como nuestra circulación va mejorando y las molestias disminuyen.
·         Evitar la ropa ceñida y los zapatos incómodos. La ropa muy ajustada, los zapatos con tacón o con tiras muy apretadas dificultan la circulación y aumentan la retención de líquidos al presionar los tejidos. En estos casos en mejor optar por la comodidad
·         Dormir y descansar con las piernas en alto, apoyadas en algún cojín para facilitar la vuelta de la sangre al corazón.
·         Acabar la ducha con un masaje de agua fría en la piernas, dirigiendo el chorro del agua con movimientos ascendentes empezando por los pies.
·         Consumir alimentos ricos en antioxidantes, como el tomate y verduras de hoja verde, y también en ácidos grasos polinsaturados, que ayudarán a hacer la sangre más fluida y disminuirán el riesgo de formación de trombos. Una estupenda fuente de estos ácidos grasos es el aceite de lino, que podemos incorporar a nuestra alimentación para aliñar nuestros platos, pero siempre en frío, ya que si se calienta pierde sus propiedades beneficiosas. El pescado azul y las nueces también son un buen aporte de ácidos grasos. También debemos dar prioridad en nuestra despensa a alimentos con propiedades diuréticas, como los espárragos, las alcachofas, el pepino, la col, las manzanas y la piña.

·         Entre las plantas que destacan por sus cualidades benéficas destacamos:

o    Ginkgo Biloba: Su contenido en flavonoides lo convierte en un poderoso vasodilatador. Estimula la circulación y mejora la coagulación. Reduce el riesgo de formación de trombos y contribuye a una mayor oxigenación del cerebro, por eso también se utiliza en tratamientos contra la arteriosclerosis, demencia senil, dificultades de concentración y cefaleas provocadas por mala circulación. Está particularmente indicado en el caso de hinchazón de piernas, reduce los calambres, y su efecto vasodilatador también es útil para aliviar las molestias menstruales, siempre y cuando la menstruación no sea abundante en exceso, ya que esta planta fluidifica la consistencia de la sangre y eso aumentaría la hemorragia.
Por eso mismo se recomienda consultar con un especialista antes de tomarla si se padece hemofilia o se está en tratamiento con anticoagulantes. El Gingko Biloba también está presente en tratamientos tópicos, como cremas antihemorroidales o las formuladas para aliviar las molestias causadas por las varices.
o    Vid Roja combinada con Ginkgo: Otra planta rica en flavonoides, con propiedades vasodilatadoras, hemostáticas y venotónicas. Por su contenido en vitamina P refuerza las paredes de los capilares y disminuye la permeabilidad de las venas, lo que impide la formación de edemas dolorosos y alivia considerablemente la sensación de piernas cansadas y mejora la apariencia de la celulitis. Otro de sus efectos es favorecer la contracción muscular de los vasos sanguíneos, por lo que facilita el retorno de la sangre acumulada en las piernas hacia el corazón. Resulta muy adecuada en el tratamiento de los problemas circulatorios: varices, hemorroides, mala circulación en piernas y pies, arteriosclerosis, flebitis…
o    Cola de caballo: A menudo confundimos la retención de líquidos causada por la mala circulación con el sobrepeso. La ropa nos aprieta, los zapatos nos dejan marca y los anillos se resisten a salir, nos sentimos hinchados y con una enorme sensación de incomodidad. Pero posiblemente no se trata de un aumento de peso real, sino de acumulación de líquidos en los tejidos. La cola de caballo es nuestro gran aliado, ya que es una de las plantas más diuréticas que existen, aumentando la diuresis hasta un 30%. Su consumo reduce la retención de líquidos y proporciona un alivio notable a las piernas cansadas e hinchadas, ayudando a sentirnos más ligeros. Su sabor en infusión no es particularmente agradable, por lo que tomarla en comprimidos puede ser la mejor opción.